EMPRESAS 2024: DESAFÍOS GLOBALES Y OPORTUNIDADES PARA LOS CEO

En este nuevo año, los líderes empresariales no solo deben preocuparse por sus estrategias de ventas, sino también por diversos factores que pueden afectarlos, como son: la intensificación de conflictos geopolíticos, el mantenimiento de tipos de interés elevados, la inflación todavía no contenida y la desaceleración económica, entre otros.

Se prevé que este 2024 va a ser un año caracterizado por la inestabilidad e incertidumbre política, social y económica, debido al complejo panorama global que se avecina, por lo que, los líderes empresariales, deberán tomar decisiones importantes, que condicionarán el éxito futuro de sus negocios. La intensificación de conflictos en Ucrania y Gaza, el mantenimiento de tipos de interés elevados, junto a una inflación todavía no contenida y la desaceleración económica principalmente en Europa son algunos de los factores a los que deberán hacer frente.

La OCDE y la Comisión Europea, proyectan que Europa experimente un crecimiento económico moderado del PIB del 0,6%, según la OCDE, y del 1,2%, según la Comisión Europea, con cifras relativamente bajas. Sin embargo, se espera que España sea uno de los países con un mejor desempeño, con un crecimiento entre el 1,4% y 2,4%.

Geopolítica y macroecomonía: La guerra en Ucrania, el reciente conflicto en Gaza o el potencial conflicto Chino-Estadounidense en Taiwán, etc. tienen ramificaciones significativas para el mundo empresarial. Los líderes corporativos deben adoptar una comprensión profunda de la interconexión entre los eventos geopolíticos y el rendimiento económico. La volatilidad resultante exige estrategias de mitigación de riesgos que vayan más allá de las fronteras empresariales convencionales.

La volatilidad macroeconómica plantea desafíos significativos para las empresas en el próximo año. Las fluctuaciones en las tasas de interés, el cambio en los patrones de consumo y las interrupciones en las cadenas de suministro son solo algunas de las variables que los CEO deben tener en cuenta.

Talento, innovación, digitalización, transformación de modelos de negocio y sostenibilidad: Algunos de los principales retos identificados para este 2024, incluyen la retención de talento, la inversión constante en innovación, la continua transformación digital, la sostenibilidad y la necesaria evolución de modelos de negocio en aras de un mayor crecimiento y de la eficiencia y eficacia operativa.

Talento: Uno de los potenciales impactos y riesgos significativos para las empresas en 2024 es la  falta de talento y la dificultad para retenerlo. Después de la pandemia, la flexibilidad laboral se ha convertido en un factor clave para retener a los mejores profesionales. Pero estos mínimos deberán ser complementados con el diseño de nuevas propuestas de valor innovadoras para el empleado, con visión 360 grados y que abarquen desde la atracción y la captación, el desarrollo, la formación y la retención, así como la definición de fórmulas innovadoras de retribución.

Innovación: Los líderes empresariales deben fomentar un ambiente creativo dentro de sus organizaciones, buscando oportunidades emergentes y ajustando sus modelos de negocio para alinearse con las nuevas realidades del mercado.

La adversidad ha demostrado ser una palanca de innovación y la necesidad ha impulsado la creatividad y la resolución de problemas. A menudo, la verdadera innovación surge de la escasez de recursos, lo que demuestra que las crisis pueden ser oportunidades para el crecimiento y el cambio. El reto es saber identificar estas oportunidades y aprovecharlas.  

Tecnología y digitalización: La acelerada evolución de la tecnología como catalizador de la transformación de las operaciones y de los modelos de negocio de la compañía seguirá siendo uno de los principales retos a tener en cuenta en los próximos meses. Se estima que, la Inteligencia Artificial Generativa va a revolucionar la forma en la que trabajamos y nos relacionamos con nuestros clientes o con otros stakeholders, contribuyendo así a redefinir la operativa en prácticamente todos los sectores de actividad a niveles todavía no imaginados.

Una de las prioridades en la definición de la relación del marco de actuación entre empresas y particulares, deberá ser el uso responsable, ético y seguro de esta nueva tecnologíabde la Inteligencia Artificial, siendo uno de los temas clave de 2024 y  que marcará el desarrollo de esta tecnología en los próximos años.

Transformación de modelos de negocio: Es conveniente para las empresas, seguir de cerca los diversos factores como: La incertidumbre política, económica y social, ya que pueden impactar en el desempeño empresarial en 2024. Esta situación puede afectar a la toma de decisiones, a la inversión y a la planificación a largo plazo, lo que a su vez impacta en la estabilidad y el crecimiento de las empresas. Además de contribuir a un entorno de volatilidad económica global, un escenario de incertidumbre global requiere que las compañías se preparen para navegar en aguas revueltas y afrontar desafíos fiscales o relacionados con las políticas industriales.

En este contexto, la adaptabilidad financiera es clave. Las empresas deben implementar estrategias que les permitan ajustarse rápidamente a las condiciones cambiantes, desde la diversificación de inversiones hasta la evaluación constante de la estructura de sus costes y el rediseño y transformación de sus operaciones para sobrevivir en este entorno incierto.     

Sostenibilidad e impacto social: Con el aumento de la conciencia de los consumidores y de los desafíos sociales y ambientales, las empresas que adoptan una estrategia de impacto social tienen más capacidad para transformar su entorno y contribuir a un futuro más sostenible.

El desarrollo de nuevas propuestas de valor, más allá del mero cumplimiento de las nuevas regulaciones de sostenibilidad, pasa por convertir a las empresas en entidades que generen impacto social, es decir, organizaciones cuya actividad económica no solo genere los rendimientos esperados para los inversores, sino que también acelere el crecimiento financiero, social y medioambiental de las comunidades en las que operan. Por lo que se prevé que este año, todo lo relacionado con los asuntos ESG (Environmental, Social and Governance) será otro reto fundamental al que se enfrenten las compañías, tanto por la creciente regulación como por el aumento de la presión por parte de otros grupos de interés, como los propios clientes o los empleados.

En resumen, en los próximos meses los líderes empresariales tendrán que gestionar la adversidad; adoptar medidas para mitigar los riesgos derivados de la incertidumbre macroeconómica y geopolítica; afianzar la evolución tecnológica y abordar con determinación la transformación hacia organizaciones que aseguren la estabilidad, la sostenibilidad y el crecimiento económico en un entorno desafiante.

Para resumir, diremos que el 2024 va a ser un año caracterizado por la inestabilidad e incertidumbre política, social y económica.  

 

Fuente: EY.com