Hoy en día las empresas están en constante transformación para continuar siendo competitivos en medio de la crisis mundial, la alta competencia y más aún la constante inflación que está afectando sus negocios.
Actualmente vivimos en un escenario de inflación global, donde el alza de precios en los productos básicos termina impactando a cualquier compañía, especialmente a aquellas que están intentando reflotar. Por ello, recopilamos algunos consejos que permitan ser de ayuda a las empresas para afrontar esta situación:
Modificación de precios:
Un estudio de Grant Thronton El Pulso Express de la Mediana Empresa afirma que el 37% de los negocios tiene o está elaborando protocolos de actuación para hacer frente a esta situación. Según el informe, que consulta a 400 ejecutivos de compañías de entre 50 y 500 empleados, el 84% de los empresarios se plantea aumentar el valor de sus productos o servicios. De todos ellos, el 55% de empresarios pretende aumentar los precios exactamente en la misma proporción que los costes, mientras que el 12% prevé incrementar su cuota de mercado asumiendo la pérdida de margen y aumentando los precios en menor proporción que los costes. Menos de un tercio (29%) de compañías consultadas en este estudio incrementarán sus precios por encima de los costes de producción.
Reducir los plazos de cobro:
Teniendo en cuenta la alta inflación, cuanto mayor sea el plazo de cobro a los clientes, mayores serán los efectos negativos de esta en la empresa. Por ello imprescindible mejorar la eficiencia de la facturación. Se deberá buscar que el periodo medio de cobro de clientes sea inferior al periodo medio de pago a proveedores. Para ello se puede por ejemplo, establecer una política de descuentos por pronto pago o por volumen. Asimismo, se puede establecer nuevas políticas salariales, recurrir a la financiación alternativa o vigilar las cadenas de suministro son algunas de las medidas que las pequeñas y medianas empresas pueden adoptar para combatir la inflación.
Proyecta a largo plazo:
Aunque la inflación no puede predecirse de forma exacta, sí es posible proyectarla hacia adelante en un acotado período de tiempo. Si sabes que los precios seguirán subiendo por lo menos hasta determinada fecha, es aconsejable adquirir un mayor volumen de los insumos lo antes que se pueda. Cabe mencionar que primero deberás evaluar la capacidad de caja que tenga la Pymes.
Vigilar las cadenas de suministro
Es importante asegurarse y no tener interrupciones en las cadenas de suministro, ya que pueden causar un daño irreparable en los negocios. Por ello es importante que las empresas cuenten con un plan de respuesta que incluya buscar mayor seguridad en los suministros, ello se puede hacer recurriendo a proveedores confiables con los que se puede hacer contratos más largos y comprar productos que tengan asegurada la oferta.
Cuidado con las compras a crédito:
Es recomendable evitar los créditos, a menos que sea algo estrictamente necesario. Ten en cuenta que, aunque el dinero pierda su valor en el tiempo, los préstamos van asociados a las tasas de interés, que, a su vez, van de la mano con la inflación.
En el caso que tengas que solicitar un crédito, lo ideal será evaluar la opción menos costosa en intereses y analizar si en los tiempos programados de pago contarás con el dinero disponible para los pagos, sin tener que afectar otras obligaciones de pago en la Pymes.
Elimina o Recorta los costos innecesarios:
Analiza todos los gastos que se realizan en la empresa, incluso los que se realizan en el día a día, ya que pueden parecer insignificantes, pero que sin embargo, si se multiplican por los 12 meses del año y terminan teniendo un fuerte impacto en el presupuesto de la Pyme.
Aprovecha la tecnología:
Con la globalización y el intercambio comercial entre empresas de todo el mundo, cada vez es necesario el uso de herramientas tecnológicas que permiten gestionar de un modo eficiente una compañía. Por lo que el uso de la tecnología juega un rol fundamental para reducir costos administrativos y conocer la situación financiera del negocio.
El Informe Europeo de Pagos de Intrum 2022 dice que el 51% de la empresas no tiene experiencia ni la capacidad necesaria para luchar contra la inflación.
Por su parte, José Luis Bellosta, managing director de Intrum en España, dice que la inflación “tendrá un impacto directo en la capacidad de las empresas para afrontar sus pagos a tiempo, y por tanto el incremento de la morosidad, lo que supone un riesgo real para el crecimiento del entramado empresarial. Esto representa un enorme desafío para las compañías”.
Fuente: Andina y Finanzarel.