La industria minera tiene el potencial de mejorar gracias a las tecnologías avanzadas, desde drones y técnicas de modelado avanzadas que crean imágenes de entornos subterráneos fuera del alcance de los humanos, hasta vehículos automatizados que evitan colisiones.
La minería es una industria que aporta materiales fundamentales y cada vez más demandados a medida que crecen sus clientes industriales, desde la automoción, la electrónica, energía, la construcción, etc.
El sector de la minería tiene grandes retos, tales como:
- Productividad: Existe la presión por mejorarla y ello se debe al apremio derivado de las oscilaciones de los mercados de los minerales. En el caso del cobre, por ejemplo, en la última década ha variado su precio entre 4 y 2 USD / libra generando un gran reto en los grandes países fabricantes y sobre todo en aquellos con procesos menos eficientes.
- Sostenibilidad: Esta se basa en la presión regulatoria, derivada de la necesidad de proteger el medio ambiente y a las comunidades en donde opera la minería, por ejemplo protegiendo los acuíferos, la calidad del aire, la fauna autóctona, entre otros.
A estos retos se le suman los enormes volúmenes que se mueven en la minería, por ello la innovación toma una gran importancia ya que puede responder a estos retos, así como también, en todo el ciclo de vida del proceso minero, tanto en la exploración, la construcción y operación, hasta el propio desmantelamiento.
Existen programas que promueven la innovación como por ejemplo el “cobre verde”, que permite la optimización de los procesos de extracción y procesamiento de mineral e introduciendo energías limpias. Otros programas como El “safe mining” es otro programa, cuya iniciativa es intentar alejar a los operadores de las zonas de riesgo de perforación o voladura, introduciendo el control remoto de equipos, sistemas automáticos de transporte, entre otras tecnologías.
Para muchas industrias, el adaptar las diversas innovaciones tecnológicas es algo difícil de resolver, debido a la complejidad en sí misma, de los desafíos, al avance tecnológico y su coste. Sin embargo, en este artículo señalaremos algunas innovaciones más comentadas, debido al impacto positivo que han causado:
Modelado 3D: Son programas en la computadora que se utilizan para crear diagramas de áreas subterráneas como parte del trabajo de exploración antes de la construcción de nuevas minas. Este puede expandir el área cubierta por el trabajo de exploración al capturar imágenes de lugares que de otro modo serían difíciles de alcanzar.
Inteligencia artificial: Existe una amplia gama de sistemas informáticos inteligentes que aprenden de experiencias anteriores y que, a menudo, se utilizan para mejorar la eficiencia operativa. Por ejemplo, existen clasificadores inteligentes en la industria minera, que utiliza sensores para detectar la presencia de minerales particulares entre el que es recuperado, lo que permite extraerlos.
Automatización Integrada: Lo que se está volviendo cada vez más común en las empresas mineras, es que con el objetivo de buscar mejorar la seguridad, prefieren utilizar vehículos sin conductor. En el caso por ejemplo de BHP, este ha invertido significativamente en la tecnología, con su centro Jimblebar en Australia Occidental, utilizando exclusivamente vehículos automáticos, lo que le ha permitido a la compañía mejorar su eficiencia operativa en un 20 %.
Drones: La industria minera la utiliza mayormente para el mapeo y la recopilación de información. Los drones permiten tener mejoras significativas en la precisión de los datos recopilados, así como también reducciones en los costos de mano de obra, debido a que los drones individuales pueden cubrir una cantidad significativa de tierra.
Control ambiental y de emisiones: En este caso se refiere a la utilización de tecnologías inteligentes para monitorear los impactos ambientales de una mina y los niveles de emisiones nocivas, respectivamente. La tecnología predictiva también se puede utilizar para ayudar a los mineros a completar evaluaciones de impacto ambiental y planificar proyectos de rehabilitación minera mucho antes de que se construya una mina.
Internet de las Cosas: Son dispositivos inteligentes conectados a través de una red, que permiten registrar y compartir datos constantemente, y el concepto se ha expandido a operaciones industriales como el “Internet industrial de las cosas” (IIOT). La recopilación y análisis generalizado de datos podría ser integral para mejorar la eficiencia operativa en el futuro de la industria minera.
Nube: Los sistemas de almacenamiento en la nube son bastante utilizados en la minería, particularmente para compañías internacionales, que coordinan operaciones en varios países y continentes. El servicio es particularmente útil para equipos en áreas con infraestructura de comunicación menos desarrollada, lo que permite a los trabajadores almacenar datos de forma segura para su uso fuera de línea.
Realidad virtual: Al igual que los drones, tiene el potencial de ser utilizada en el mapeo, pero también se ha utilizado en capacitación y educación.
La seguridad cibernética: A medida que las compañías mineras incorporan tecnologías más inteligentes, surge la imperiosa necesidad de proteger los datos. Muchas de las empresas mineras están alertas de este tema.
Un informe realizado por Telstra encontró que menos de una cuarta parte de las compañías están preparadas para las posibles amenazas cibernéticas asociadas con un mayor cambio al almacenamiento de datos basado en la nube, y las compañías mineras en particular podrían ser vulnerables.
Finalmente, es necesario señalar que satisfacer el gran requerimiento de integrar las nuevas tecnologías e innovar en los procesos productivos plantea la obligación de desarrollar un esfuerzo mutuo entre las industrias minera y tecnológica, con el fin de presentar soluciones innovadoras y eficientes, disponibles las 24 horas del día y los 365 días del año. Se trata de un gran desafío que permitirá modernizar los procesos mineros.
Fuente: Worldenergytrade