En épocas recientes el mundo ha vivido una crisis financiera, a causa de la pandemia y otros factores propios de cada país. Por lo que, las crisis financieras son eventos de alta carga destructiva, quiere decir que la empresa, sin importar el tamaño o sector, se encuentra en una situación de alto impacto negativo. Hay que tener en cuenta que existen ocasiones que nos anuncian situaciones de crisis y en otras no, pero lo más importante es saber en qué punto será el desenlace de esto, cuándo va a pasar.
¿Cómo actuar ante una crisis?
La velocidad de respuesta, es muy importante frente a una crisis, saber qué tan temprano se puede manejar la crisis y qué tan eficaz es la respuesta de la empresa ante este tipo de sucesos. Las soluciones tempranas son tremendamente más eficaces que las tardías. Asimismo, es importante, dar a conocer a la junta directiva de la empresa, la situación actual de la misma, con el objetivo de recopilar toda la información sobre qué es lo que está pasando, ya que esto permitirá saber que acciones tomar sobre lo sucedido.
Anticiparse a una crisis:
De cada 100 crisis empresariales, 96 están “larga y silenciosamente anunciadas”, pero nadie las quiere ver. La mejor forma de combatir las crisis en las empresas, es fomentando una cultura organizacional basada en avisar sobre los posibles riesgos. En algunas empresas se crean los comité de crisis o comité de Riesgos, para tener un protocolo establecido y de fácil ejecución ante un suceso inesperado.
Métodos para cobrar a tiempo las facturas:
En las empresas el alargamiento de los plazos de cobro, es un fenómeno muy habitual, que producen no solamente un riesgo de morosidad para el pago de las obligaciones, sino que además se produce un desfase entre el vencimiento teórico de pago y el cobro real de las facturas.
A continuación, conoce algunos métodos a seguir, que podrán facilitar estas tareas y lograr el cobro de las facturas en los tiempos establecidos:
-Factura online: Existen programas y plataformas que pueden llevar un registro de información de clientes y son capaces de detectar y alertar los vencimientos de las facturas que se ingresen en ellos, por lo que, para llevar un adecuado seguimiento, hay que tener los datos lo más actualizados posible. Asimismo, se debe contar con algún colaborador que se encargue de estar revisando periódicamente las fechas de cobro de los clientes y así tener una asistencia infalible.
-Facturación rápida y limpia: Las desventajas de realizar la facturación a mano, es que pueden haber errores accidentales o pequeños detalles que pueden arruinar una facturación, como errar con el método de pago, poner mal un número de cuenta, equivocarse en el número de RUC, etc. Por ello, es recomendable actualizar, revisar las facturaciones y preguntar por los métodos de pago.
En el caso de la facturación digital es más rápida, ya que si se hace bien el proceso de preguntarle al cliente detalles específicos (incluyendo método de pago) y con todo lo que requiere el documento, se tendrá la información actualizada, lo que ayudará a realizar la facturación de una forma sencilla y rápida ya que se tendrá un software que guardará y recordará dicha información.
-Mantener una buena relación con el cliente: Si se tiene una buena relación con el cliente no temerá consultarle. Para esto, se le debe recordar y alertar antes de los vencimientos, manteniendo una comunicación amable, agradable y asertiva.
-Negociar los términos de pago: Se presentarán ocasiones en las que el crédito otorgado sea grande y llegue al tope de la línea de crédito. Cuando estas situaciones pasen, es casi seguro de que no se van a liquidar las facturas, por ende, se debe tener en cuenta antes y después la capacidad de pago de los clientes. En caso de tener algún problema como este, en el que el cliente no pueda cubrir el total de la deuda, es necesario negociar: se pueden pedir anticipos con una o dos semanas de anticipación. También, se puede ofrecer otros métodos de pago, como por ejemplo: pagar en la sucursal, transferencia electrónica, cheque, etc.
-Contar con un sistema de pagos basado en recompensas: A veces puede ser conveniente ofrecer una recompensa o descuento sobre el total de una factura, siempre y cuando se cubra a tiempo, por ejemplo se les ofrece un 5% de descuento si pagan su factura a los 30 días y 3% si pagan a los 45 días. Pero también hay formas de castigos, que podrían basarse en un porcentaje que se va a cobrar sobre el total de la factura por mora. Por ejemplo: 5% más en caso de que supere el plazo de 30 días y así sucesivamente por cada determinado tiempo transcurrido.
-Saber dirigirse al cliente en buena forma: En caso de que ya se haya retrasado el pago, se debe mantener la calma y estar en constante comunicación con los clientes. ¡No se debe atacar! Sino ser insistente y amable, recordándole que tiene otras opciones a que recurrir. También, se le puede comentar que el departamento de cobranza está presionando por este pago atrasado y que se está pensando en pasar a otra fase de cobranza del mismo, si no se realiza, la cual pudiese ser, según el caso: aplicar una penalización por la mora, cortar su acceso al servicio que se le brinda o también enviar la factura a una empresa especializada en cobro a morosos.
Fuente: Datacreditoempresas